Todos los perros son diferentes. Con características físicas, cualidades  y carácter muy diferentes entre ellos. En especial el tipo de mordida. En los perros de raza peligrosa, por ejemplo, este aspecto es muy relevante. Pues es posible que sean mordidas muy graves, incluso pueden ocasionar la muerte de la persona.

En consecuencia, considerando esta y otras diferencias físicas entre las diferentes razas de perros, el gobierno español crea el Real Decreto 287/2002, de 22 de marzo. Se desarrolla la Ley 50/1999, de 23 de diciembre, sobre el régimen jurídico de la tenencia de «perros potencialmente peligrosos».

La agresividad de un perro no depende solo de factores genéticos o físicos, sino también de factores ambientales. En general, se considera como como peligrosa cualquier especie silvestre. Que tenga actitud agresiva o con características anatómicas que sean riesgosas en caso de producirse un ataque.

Pero también es de gran influencia el adiestramiento que ha recibido el animal. En especial si el adiestramiento se enfocó al ataque o para infringir daños a terceros. Bien  sean a otras especies animales o a las personas.

Esto hace que existan perros más peligrosos que otros. Que por su raza o características anatómicas son considerados peligrosos, pero que están perfectamente capacitados para convivir en familia. En algunos casos ocurre lo contrario. Hay razas de perros aparentemente inofensivas que resultan ser peligrosas si el entrenamiento recibido fue agresivo.

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Ley de perros de raza peligrosa en España

Hay muchas razas de perros consideradas como perros de raza peligrosa o perros potencialmente peligrosos (PPP). De acuerdo al anexo I del Real Decreto 287/2002 de 22 de marzo.

Sin embargo, también serán considerados perros PPP, los que sean engendrados por cruces de perros raza peligrosa. Además de aquellos que cumplan ciertas características físicas. Tal como se indica en el anexo II del Real Decreto.

  • Musculatura fuerte, aspecto poderoso y robusto, configuración atlética, gran agilidad, vigor y resistencia.
  • Marcado carácter y gran valor.
  • En general de pelo corto.
  • Perímetro torácico con medidas explicitas, comprendido entre 60 y 80 centímetros. Altura a la cruz entre 50 y 70 centímetros y un peso corporal superior a 20 kg.
  • Perros de cabeza voluminosa, cuboide, robusta, con cráneo ancho y grande y mejillas musculosas y abombadas. Con mandíbulas grandes y fuertes y con boca robusta, ancha y profunda.
  • Razas de perros con cuello ancho, musculoso y corto.
  • Pecho macizo, grande, ancho y profundo. Así como también costillas arqueadas y lomo musculado y corto.
  • Con extremidades anteriores paralelas, rectas y robustas. Y las extremidades posteriores muy musculosas, con patas relativamente largas que formen un ángulo moderado.

Además de todas estas características, un perro también puede ser considerado como PPP en determinadas comunidades autónomas, de acuerdo a sus normativas. O también por orden expresa de un médico veterinario.

La legislación española establece ocho especies caninas como «altamente peligrosas». Los perros más peligrosos que usted pueda conocer pertenecen a estas razas.  Pit Bull Terrier, American Staffodshire Terrier, Staffordshire Bull Terrier, Dogo Argentino, Rottweiler, Fila Brasileiro, Tosa Inu y Akita Inu.

Cada una de ellas con características específicas que los hacen perros más peligrosos que otras razas.

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Qué se necesita para adoptar un perro PPP

Hay unos cuantos requisitos que se deben cumplir para adoptarlos. Lo fundamental para adoptar perros de raza peligrosa, es obtener una licencia administrativa. La cual certifica que la persona que la porta cumple todos los requisitos que impone el estado.

Las personas con perros potencialmente peligrosos a su cargo en España, deberán cumplir con los requisitos contenidos la ley.

  • Ser mayor de edad.
  • No tener antecedentes penales. La persona que desea adoptar uno entre los perros más peligrosos, no debe haber sido condenado por delitos de homicidio. Así como por lesiones, torturas, contra la libertad o contra la integridad moral, la libertad sexual y la salud pública. O tener alguna asociación con banda armada o de narcotráfico.

Tampoco debe estar privado por resolución judicial, del derecho a la tenencia de animales potencialmente peligrosos.

  • Nunca haber sido sancionado por infracciones graves o muy graves. Con alguna de las sanciones accesorias de las previstas en el apartado 3 del artículo 13 de la Ley 50/1999, de 23 de diciembre, sobre el régimen jurídico de animales potencialmente peligrosos.
  • Disponer de capacidad física y aptitud psicológica para la tenencia de animales potencialmente peligrosos.
  • Acreditación de haber formalizado un seguro de responsabilidad civilpor daños a terceros con una cobertura no inferior a 120.000 €.
  • La licencia debe renovarse cada 5 añosy se renovará siempre que el titular no deje de cumplir algunos de los puntos establecidos con anterioridad. Además, se deberá realizar un examen físico y psicológico. Que acredite que la persona solicitante de la licencia con capacidad visual, auditiva, sistema locomotor y sistema neurológico dentro de los parámetros normales.

Asimismo,  las personas  con trastornos mentales y de conducta, así como las que no tengan  buena capacidad en la toma de decisiones, están incapacitadas para tener como mascotas perros de razas peligrosas.

Normativa para los perros más peligrosos

Las personas con perros considerados potencialmente peligrosos, según el BOE, deben cumplir ciertas normas en espacios públicos.

  • La persona que lleve a su cargo un perro potencialmente peligroso debe portar la licencia en espacios públicos, que lo acredite para tener perros raza peligrosa. Así como también la inscripción en el registro municipal. Siempre debe portar consigo el permiso para tener como mascota un PPP. Tal como un carné de conducir o el pasaporte
  • Estos animales siempre deberán utilizar bozal en espacios públicos.
  • No se podrán pasear perros potencialmente peligrosos con una correa extensible o mayor de 2 metros de largo. Deben mantenerse estas características en las correas.
  • Una misma persona no puede pasear a dos perros considerados potencialmente peligrosos al  mismo tiempo.
  • Está prohibido que un perro considerado potencialmente peligroso esté suelto o fuera de una zona delimitada y cerrada. Aunque sea una propiedad privada.
  • El robo o pérdida de perros de raza peligrosa, debe ser comunicado al registro municipal en un plazo máximo de 48 horas. A partir del momento que se tenga conocimiento de su desaparición.

Ante el incumplimiento de estas normas se aplicará una sanción que puede ser considerada leve, moderada o grave. Implica o no sanción monetaria y hasta el decomiso del animal. Son normas importantes que debe cumplir si piensa en adoptar un perro considerado como potencialmente peligroso.

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