Conoce al milenario Mastín Napolitano
Pesado al andar y acostumbrado al trabajo, el Mastín Napolitano es una raza que existe desde hace mucho tiempo. Leal, formidable y lleno de energía, este can disfruta de la vida familiar rodeado de mucho espacio para correr y ejercitarse. El perro Fang del personaje Hagrid en la renombrada serie de películas Harry Potter, es interpretado por un Mastín Napolitano.
Origen del Mastín Napolitano
Descendiente del Mastín Tibetano, esta raza fue llevada más allá de las montañas por los sumerios para ser utilizados en la caza de leones. Durante una expedición a Britania, Julio César se enamoró de estos perros y los llevó a Roma, donde rápidamente fueron empleados como luchadores y guardianes de las casas. Tras la caída del imperio romano casi se extinguen, permaneciendo sólo al sur de Italia, en 1949 son reconocidos oficialmente como raza adoptando el nombre de Mastín Napolitano.
Sabías que… los sumerios extendieron estos canes hace 4000 años por Mesopotamia.
Características del Mastín Napolitano
Macizo y de musculatura bien desarrollada, el Mastín Napolitano llega a medir entre 65 y 75 centímetros con un peso que oscila 60 a 70 kilogramos, aunque la hembra es más baja y ligera.
Su cabeza es maciza con un hocico corto y poderoso. Las orejas son triangulares y pequeñas, de consistencia blanda y la cola es razonablemente larga, ancha en la raíz yaguzándose levemente hacia la punta. La espalda es larga y el pecho amplio y profundo. Todas las patas son gruesas y musculosas. Generalmente negro o gris y llega a vivir 10 años.
Poseedor de mucha fuerza, el Mastín Napolitano es un perro tranquilo que prefiere descansar y usar su energía cuando es necesario. Bien educado desde cachorro, demostrará cariño a todos los miembros de la familia, siendo importante dejarle claro que es el último en la cadena de mando. Su tendencia a ser dominante lo lleva a demostrarlo a otras mascotas pero sin agredir. Es sensato acudir a un profesional para el correcto adiestramiento.
Alimentación del Mastín Napolitano
Es necesario comprender dos aspectos clave de la alimentación de un Mastín Napolitano. El primero, es que siempre debe estar relajado antes y después de comer para evitar la torsión gástrica. Lo segundo es que es propenso al sobrepeso, siendo vulnerable a displasia o artritis, y al ser capaz de soportar mucho dolor, es peligroso que un ejemplar sea muy pesado. Su dieta debe ser baja en grasas, rica en proteína magra como atún o pavo con un buen balance de carbohidratos y vegetales. Algunos dueños prefieren dieta BARF combinando arroz o pan.
Cuidados del Mastín Napolitano
A esta raza le gusta mucho trabajar, los Mastines Napolitanos han sido utilizados como perros de arrastre, defensa personal para personas discapacitadas, perros policía, entre otras profesiones. Necesitan al menos tres paseos al día para mantenerse sanos y desarrollar la musculatura característica, los cachorros deben tener un bajo nivel de actividad para no desarrollar enfermedades en las articulaciones una vez adultos.
La higiene del Mastín Napolitano debe ser minuciosa, las arrugas de su cara necesitan limpieza después de cada comida. Cepillar el pelaje semanalmente y bañarlo cada seis u ocho semanas es lo recomendado. Debe ser socializado desde cachorro para que no desarrolle trastornos sociales, indeseados en cualquier animal y peligrosos en un perro gigante y potente como este.
Aunque no está catalogado como potencialmente peligroso en España, es prudente pasearlo con correa corta, bozal y presentarlo en la Municipalidad. No se recomienda para casas pequeñas ni apartamentos. Un criador de un Mastín Napolitano debe ser responsable y no educarlo para atacar, bastará con que conozca a su familia, capaz de controlar al perro y con capacidad económica para brindarle buena salud al animal.